Esos colores de las hojas secas, el sol que se refleja tras la persiana, ese aroma a frescor, la luz vívida de la leña del fuego… Esos colores que dan fuerza y energía a la estancia: mostaza, marrones muy saturados, rojizos, blancos, negros…
Y es que, sin duda, el otoño invita a estar acurrucado y arropado por nuestro hogar. Esta sensación de confort y un aporte de calidez extra lo crean las alfombras.
Apuesta por maderas oscuras como nogal, ébano, teca o wenge en muebles, para que puedas contrarrestarlo con paredes blancas o beiges y complementos de otros colores que aporten más luminosidad. De esta forma puedes iluminar estas piezas más grandes y, a su vez, darle protagonismo a cada detalle.
Para los más atrevidos, esta paleta de color es esencial por el juego de luces que ayudan a recrear un espacio mágico y que, por si fuera poco, está como tendencia el amarillo, Pantone de 2021.
Puedes conseguir un aire vintage o incluso uno elegante y sofisticado con accesorios dorados, por su destello.
Esta gama de colores representa la fuerza, el optimismo y la vitalidad, por eso es ideal para espacios más creativos como la oficina de casa, el cuarto de invitados o para las habitaciones infantiles.
No hay comentarios